Ricardo Ferreiro, President of Exploration & Production, spoke during the panel on Vaca Muerta at the event organized by Forbes Argentina magazine on the energy industry. 

“Fortín de Piedra is the largest gas field in Argentina, and represents 1.5% of the total surface area of Vaca Muerta, meeting 14% of the country’s needs,” opened Ricardo Ferreiro, the new President of Exploration & Production at Tecpetrol, who has taken the reins from Horacio Marín following the latter’s departure to YPF. The Tecpetrol executive discussed the volume, materiality and potential of the operation during his speech at the Forbes Energy Summit cycle entitled Making the leap to exports, an event organized by Forbes Argentina magazine.

Although this unconventional formation has proven its worth and competitiveness at world-class level, it’s currently only developing under 10% of its capacity. This was precisely the point discussed by Ferreiro and Matías Campodónico, President of Dow Argentina, as the two executives reviewed the plans being pursued by operating companies in the area. The panel was moderated by Fernando Heredia, Editor of Money & Energy in the local edition of Forbes.

“Argentina tiene la oportunidad de poner en valor un recurso enorme, tenemos gas para 150 años o más”, agregó Ferreiro sobre las perspectivas del negocio. Como empresa líder en gas –este año que termina Fortín de Piedra llegó a 24 millones de metros cúbicos en un día– se abre una ventana para el petróleo. “En los últimos años estuvimos trabajando en campos petroleros, con buenos resultados y estamos en condiciones de comenzar a trabajar en la perforación”, agregó.

“De la superficie para abajo ‘somos Estados Unidos’, con una roca muy competitiva, y podríamos producir entre 70 mil y 100 mil barriles de petróleo si se dan las condiciones macroeconómicas”, ponderó Ferreiro. Entre los requisitos “para dar el salto de escala”, apuntó además temas regulatorios y de infraestructura.

El camino verde

Por su parte, Matías Campodónico, Presidente de Dow Argentina y Región Sur, señaló que el futuro promisorio debe considerar la agenda de la transición energética. “En la Argentina hay gas para todos pero tenemos una meta de lograr en 2050 la neutralidad del carbono, por eso tenemos que ser muy inteligentes”, destacó. “El mundo entendió que se necesitan todas las energías para la transición”, acordó Ferreiro. “Y la Argentina puede contribuir a la descarbonización del mundo”.

Incrementar el volumen para abastecimiento en invierno, ampliar el sistema de transporte para abastecer a Bolivia y crecer en el mercado regional, con exportaciones a Chile y Brasil, además de los proyectos de licuefacción (GNL) marcan la hoja de ruta de Vaca Muerta para el desarrollo de su potencial.

“El mundo se podría diversificar en sus fuentes de abastecimiento con buenos productos. Nosotros debemos aprovechar esta ventana en tiempo y forma para poder capturar valor –analizó Ferreiro–, porque los outtakes ya se están asegurando la provisión de gas para dentro de dos o tres años, y tenemos que estar ahí para esa conversación”.

En cuanto a prioridades, Campodónico marcó la necesidad de industrializar la producción para multiplicar el valor de cada molécula de gas, además de la urgencia de la reversión del gasoducto Norte. “Lo que necesitamos es un país normal, pero hay un consenso social del rumbo del país, así como en el debate de la sustentabilidad”.

La disponibilidad de capital surgió como la variable fundamental para el futuro. “Hay mucho músculo, son muchas las empresas que están detrás de capturar la oportunidad y solo necesitamos que lleguen las inversiones para lanzar todos los proyectos del porfolio, porque no compiten entre sí”, concluyó Ferreiro. Y antes del final, destacó que la balanza energética de -12.000 millones de dólares pasará el año próximo a un superávit de +3.000. Un cambio significativo.