Casi nueve mil kilos de colaboración
Tecpetrol se sumó, a nivel global, al mes más limpio del año. Cada operación tuvo su enfoque particular. Te contamos todas las iniciativas.
El punto de partida es mundial. En septiembre, como cada año, se celebró el Mes de la Limpieza, organizado por Clean Up the World. Stephen Wharton, Environmental Sr. Manager, que lideró el proyecto dentro del área de Seguridad, Ambiente y Salud, dice: “Nos involucramos de forma institucional con la campaña en todas las operaciones de Tecpetrol desde El Tordillo, al sur de Argentina, hasta Pesquería, en México”.
Septiembre fue amable a nivel temperatura en todas las operaciones: se aprovecharon tanto la fresca primavera del sur como el fin del verano en el centro y el norte de América. Se lo ve contento a Stephen, y no es para menos: “Está institucionalizado: el Mes de la Limpieza empezó como una iniciativa en Neuquén y se fue extendiendo al resto de las operaciones”. Es una gran práctica, con la novedad de que cada una de las áreas aportó y diversificó el desafío con ideas propias.
Por ejemplo en Aguaragüe, Salta, el equipo de Miguel Iriarte, Health, Safety & Environment Manager, hizo algo disruptivo: aprovecharon una actividad de trekking familiar en el sendero del Santuario de la Virgen de la Peña, en la comunidad Yariguarenda, para limpiarlo. Participaron diecisiete personas y, en el marco de actividades recreativas y de supervivencia, bajaron con muchas bolsas con residuos.
En tanto en Colombia hubo competencia (sana, por supuesto): ganaba el que juntaba más botellas plásticas para ser entregadas a la fundación Botellas de Amor. En Bogotá dejaron todo para reunir la mayor cantidad de kilos de envases plásticos. ¿Las mejores performances? Daniela Pineda, Elizabeth Rincón, Julieth Salcedo y Lilibeth Sánchez. El equipo CORE (Community Relations), de la CPF de Tecpetrol, también se sumó a la competencia junto a un grupo de contratistas. En Pendare fueron originales: hicieron ecoladrillos en sus casas.
Andrea Monroy, Health, Safety & Environment Analyst en Quito, participó, junto con sus compañeros, desde las oficinas administrativas. Andrea destaca el apoyo de Francisco Do Pico, Country Director, que los incentivó a participar en horario laboral. “Fuimos a un parque público muy concurrido en Quito. Debajo de ese parque hay un acuífero. Recolectamos muchísima basura que no se detectaba a simple vista”. Agrega que en el Campo Libertador se realizó una limpieza de basura en el campamento y en las áreas cercanas al río.
La campaña en la Central Eléctrica Pesquería se realizó mediante la metodología japonesa 5S de orden, limpieza y mejora de sitios de trabajo: Tener solo lo necesario. Cada cosa en su sitio. Cada objeto en su lugar. Marcado. Mejora continua.
Con ese método, las cuarenta y cinco personas que se sumaron lograron recoger una gran cantidad de residuos peligrosos y casi seis mil kilos de residuos sólidos urbanos. Por su parte, la operación de Reynosa vio cómo noventa de los suyos salían a participar del operativo de limpieza.
“En Neuquén”, continúa Stephen, “se hicieron tres campañas en una. Fortín de Piedra, Agua Salada y Los Bastos. En Fortín, por ejemplo, nos sumamos y reforzamos los eco tours, una actividad con la que una vez por semana se recorren las inmediaciones de los equipos de torre para mitigar la basura que se llevó el viento”.
Las sensaciones son cada año mejores porque la iniciativa va creciendo: “Cada edición se suma más gente. Es un mes que ya está en agenda y con un detalle clave: el apoyo de la dirección, en todos sus niveles, ya sea brindando las condiciones o directamente sumándose”.