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Un impulso para volver al ruedo

Una buena noticia como el traslado dentro de la compañía implica también una suerte de duelo para quienes acompañan. A sostenerlos apunta el programa Carreras Duales, ideado por Tecpetrol con el apoyo de consultoras expertas en relocalización. Conoce las historias.

Milagros Gazcón era una socióloga porteña que se instaló en Comodoro Rivadavia en 2012 para acompañar a su pareja, Juan Martín Andueza, Development Geologist Specialist en Tecpetrol. Aunque había continuado su carrera en el sur argentino, en 2021 llegó el traslado de regreso a Buenos Aires. Y algo pasó. “Estaba volviendo a mi ciudad de origen y conocía gente, tenía capital social, una red de contactos, pero volver a insertarse en un mercado laboral con tanta oferta de profesionales, viniendo de un mercado más chico y menos especializado era un gran desafío y podía pasar que mi experiencia en Comodoro no fuera relevante para quienes evaluaran mi perfil”, contó Milagros.

Ante la incertidumbre, en esta segunda mudanza aceptó la invitación a participar del programa Carreras Duales, el programa de Tecpetrol ideado para acompañar y orientar a las parejas de los colaboradores ante un traslado, en función de un desarrollo profesional con oportunidades equitativas para ambos.

“Ante la relocalización, quienes acompañan pasan por un proceso de duelo: dejar la ciudad, la carrera, los amigos y el peso mismo del cambio. Da lo mismo si es Neuquén o México. Y mientras algunos se adaptan más fácilmente, otros no tanto y les pega más fuerte, de acuerdo al momento personal”, contó en entrevista María Florencia Martínez, responsable junto a María Eugenia Peña del programa Carreras Duales, que elaboraron a medida para Tecpetrol.

“A veces la pérdida es muy fuerte, pero es un momento para aprovechar y pensarse a sí mismo, para definir qué quieren ser”, sumaron las consultoras de Relocare, una empresa de relocalización boutique, con 22 años de experiencia en el mundo corporativo. “El tema genera mucha presión en las parejas, hay mucho que hablar”, explicaron.

Preparados, listos, ya…

Tras la conversación conyugal, los candidatos que se inscriben en Carreras Duales tienen una serie de encuentros virtuales de una hora con las consultoras, que se adaptan al caso particular. Después de la call, reciben tareas específicas: responder avisos, trabajar sobre sus habilidades, hacer ejercicios y preguntas para hacer ejercicios para profundizar en los propios intereses. En casi cuatro años de experiencia, el diseño del programa personalizado incluyó, en diferentes casos, la preparación para entrevistas clave y seguimiento hasta que consigan definir sus proyectos profesionales, o un tiempo de espera para abordar la búsqueda: a veces es un volver a empezar.

“En los encuentros pude redescubrir mi valor, lo que podía aportar y revalorizar mi propia experiencia en otra ciudad, pero lo más importante fue que me ayudó a tomar confianza y ganar coraje para tocar las puertas de las personas que conocía”, evalúa Milagros Gazcón.

“El programa me ayudó a organizar y planificar mi búsqueda laboral, identificar oportunidades y pensar en nuevas opciones”, relató Sueanny Ortiz, quien se trasladó de Quito a Bogotá junto a su compañero, Byron Duque, cuando fue nombrado IT Regional Manager en Colombia. A través de partners locales en cada ciudad, la consultoría aportó también contactos profesionales en el país de destino.

“Al principio fue un poco desafiante la relocalización porque implicó dejar mi trabajo anterior y repensar cómo continuar desarrollando mi carrera desde Neuquén. Carreras Duales fue un buen apoyo”, relató a Tecpetrol Hoy Carla Isnaldi, Psicóloga consultora en temas de Equidad de Género y Diversidad, quien dejó Buenos Aires con su pareja, Matías Brolli, Development Sr. Manager en Neuquén, y su niña de un año y medio.

“Entre las herramientas, destaco la propuesta a repensar y rediseñar el perfil profesional tanto en redes sociales como en el CV, de cara a los objetivos de carrera y adecuados a las nuevas condiciones, que en mi caso se basó en pensar y robustecer un poco más mi perfil como consultora, ya que en esta etapa se ajustaba más a mis necesidades e intereses que tenían que ver con la modalidad de trabajo flexible y homeoffice”, agregó.

Por el programa, que es de carácter voluntario, hasta el momento participaron 11 parejas, en la que los candidatos fueron hombres en tres casos y mujeres en ocho.

Soporte laboral y emocional

“Analizamos el perfil personal y las capacidades adquiridas, ayudamos al candidato a ver lo que no puede ver, cuando sienten que no tienen valor como profesionales porque cortaron su carrera”, resumió María Florencia Martínez, expatriada y relocalizada en el pasado. “Es una crisis de identidad, y ayudamos a descubrir esta nueva identidad”, aportó María Eugenia Peña.

Para Milagros Gazcón, la efectividad del programa depende mucho del perfil de la persona. “A veces puede dar herramientas concretas y otras funcionar como una terapia que te llena de confianza y te anima a correr los riesgos necesarios para volver al ruedo”.

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