En un nuevo episodio de Historias nuestras, conocemos a la persona detrás del cargo. Eugenia Aniasi lidera el proyecto de exploración de México y conversa sobre los desafíos de combinar su profesión con la crianza de su hija Martina.

María Eugenia Aniasi es geofísica de exploración y su amor por la naturaleza y las ciencias comenzó desde muy joven. Buceando en su memoria, recuerda con mucha pasión la antigua enciclopedia del oceanógrafo francés Jacques Cousteau que leía durante horas, con sus imágenes del mar y los relatos de la formación de océanos y la investigación geológica. En su casa, el estudio era un valor que estaba flotando en el aire y, tanto su madre como su padre, fomentaban mucho la lectura.

Finalmente, ese amor por la naturaleza se terminó de confirmar con un test vocacional que la orientó hacia las ciencias exactas y naturales. En 9 de julio, su pueblo natal en el interior de la provincia de Buenos Aires, no había geólogos, mucho menos montañas: "en la mitad de la pampa húmeda que una mujer dijera que quería ser geóloga era extraño", recuerda risueña. Pero hacia allí se embarcó y a los 17 años se cruzó con el Museo de Ciencias Naturales de la Plata que la terminó de enamorar de su profesión definiéndose por la geofísica.

Hoy, hace 11 años que trabaja en Tecpetrol y asumió el rol de liderar, desde Buenos Aires, el proyecto de exploración en México. Visto de forma retrospectiva, este punto de inflexión en su carrera implicó un camino de muchos desafíos y sobre todo la cintura de combinar su carrera profesional con la maternidad en un hogar monoparental. Ser madre soltera de Martina (15 años) le dio la potencia de saltar esos techos de cristal y construir un modelo de liderazgo femenino en la industria.

Eugenia recuerda claramente ese primer anuncio de Tecpetrol que vió en el diario Crónica de Comodoro Rivadavia donde había iniciado su carrera en el sector de Oil & Gas. Decía así: "se busca geofísico o intérprete sísmico con 5 años o más de experiencia, y definía un par de temas y yo dije ¡este aviso es para mí! ¡Lo escribieron para mí!", cuenta.

Su hija Martina tenía en ese entonces 4 años y, a pesar de la dificultad de asentarse en Buenos Aires, no lo dudó. Era el momento para crecer en su profesión. Pero en ese proceso de mudanza, antes que pensar en un departamento para alquilar, lo fundamental era encontrar una niñera de su entera confianza para dejar al cuidado de su hijita Martina, ya que su red familiar estaba lejos. "Fue clave encontrar esas mujeres indicadas que las llamo hadas madrinas que pueden hacer todo. Es todo una decisión y elección que hay que hacer ya que le estás dejando lo más preciado que tenés", reflexiona.

Cómo compatibilizar el rol de madre y de profesional es central en la historia de Eugenia y los sesgos de género la atravesaron en su recorrido: "sentí eso de estar en falta como profesional y como madre" y analiza esos espacios de socialización por fuera de la oficina en donde las personas sin responsabilidades de crianza pueden construir vínculos profesionales y de confianza.

"Pensaba que nunca me iban a ver para un puesto de liderazgo porque soy mamá sola y tengo que salir a apagar incendios a cualquier hora, pero vieron algo en mí que les mostró que podía ascender y se dió naturalmente".

Hace 18 años que Eugenia está en la industria y vivió de primera mano esos cambios de perspectiva en relación a la diversidad. Además, por su forma de ser y por su crianza guiada por mujeres fuertes, de acción y decididas, pudo ir superando todos los obstáculos.

Ese es el legado que está construyendo en su hija Martina: tener una mirada hacia el otro, ser responsable de su vida, de sus decisiones y, sobre todo, ser humana.

ESCUCHA LA HISTORIA DE EUGENIA

Si quieres compartir el podcast con tu familia y amigos, puedes seguir nuestra cuenta en Spotify, Apple podcast, Google podcast, Deezer y otras plataformas. Búscanos como Tecpetrol podcast.