A cargo de la Región Norte, Tania Espíndola, HRBP Regional Sr. Manager, comparte su visión del rol actual del área de Recursos Humanos y de su manera de gestionar equipos.  

En Tecpetrol desde marzo de 2018, Tania Espíndola, HRBP Regional Sr. Manager, tiene a su cargo el área de Recursos Humanos y ahora toda la Región Norte, que incluye México, Colombia y Ecuador. Con base en Ciudad de México, su equipo está disperso y esa realidad, más las particularidades y regulaciones de cada país, la impulsa a generar lazos cercanos, que es una de las marcas de su liderazgo. Madre del pequeño Alonso, de ocho años, y con un trabajo demandante, disfruta mucho del tiempo libre con su familia. “Se trata de construir entre todos el lugar en donde queremos estar”, dice en esta entrevista. 

¿En qué consiste tu trabajo de todos los días?

El sector de Recursos Humanos está dividido en diferentes áreas como administración de personal, atracción de talento, capacitación, compensaciones y aquí en Región Norte somos especialistas en todos los temas. Esto también conlleva la parte de evaluación de performance, identificación de altos potenciales y luego las acciones subsecuentes. En México nos ocupamos del tema de relaciones laborales, y tengo comunicación constante con organismos centrales. Si bien en mi equipo hay referentes locales, tomo algunos temas en persona por su sensibilidad o porque pueden llegar a impactar al negocio. En mi equipo están muy preparados y es importante que vayan al frente para aprender y tener su propia experiencia pero hay cosas que directamente las llevo. 

¿Cómo podrías definir el impacto de los recursos humanos en los resultados?

Administramos las personas que hacen posible los resultados del negocio. Y en la medida que cada uno se siente escuchado dentro de la compañía gestionan de una manera positiva. En situaciones que dependen de RRHH, la clave está en hacer foco y canalizar su energía en lo que a cada uno le corresponde, sin preocuparse de otros temas, como cuando tenemos que agilizar el cambio de vida que emprenden los expatriados. En la medida en que no minimizas situaciones, la gente se siente parte y al final se ve reflejado en sus acciones.

¿Crees que hubo una evolución en el área de RRHH? 

Sí, el rol de Recursos Humanos cambió muchísimo. Hoy debemos actuar rápido, ser conscientes y cercanos. Un líder debe ser cercano no solamente a su equipo sino también a las personas a las que le brinda un servicio. Lo platico mucho con mi equipo. Somos facilitadores, tenemos que buscar cómo ayudar y cuando tenemos que decir que no, ver las formas de cómo trasladar el mensaje. 

Actúan ante situaciones específicas, pero también proponen iniciativas...

Mira, yo estoy enamorada del programa +d (más diversidad). Me parece muy enriquecedor cómo se ha manejado en esta nueva etapa. Hoy en Tecpetrol somos más ágiles en resolver temas, y las encuestas de opinión y de pulso nos ayudan en la medida que derivan en diferentes acciones, que también nos sacan del día a día administrativo. Empezamos a involucrarnos y a entender qué está pasando con las personas. Trabajamos en sintonía con los Aliados del Cambio, los que están dentro de los equipos de trabajo, que colaboran con nosotros. Se trata de construir entre todos el lugar en donde queremos estar.

¿En qué notas ese cambio? 

Son las cosas de las que antes no se hablaba, simplemente sabíamos que trabajamos con diferentes culturas. Hoy son conversaciones, sabemos que hay que entender las diferentes formas de pensar, de vivir incluso. Me acuerdo cuando llegué a Tecpetrol en 2018 que me llamaba mucho la atención que la gente me decía: “Así se hacen las cosas aquí”. Y yo decía ok, pero podemos hacerlo distinto. Estaban muy adaptados a la cultura de la organización, muy estructurado y está bien. Soy fiel creyente de las normas y también me gustan, pero había cosas que se podían ir actualizando y de a poco lo fuimos haciendo. Hoy ya no escucho esa frase, porque ha habido un cambio muy fuerte en el manejo, en la cultura, en el estilo incluso de liderazgo. Hoy cada jefe se tiene que hacer cargo de sus equipos y nosotros somos aliados. Hay una dinámica de trabajo distinta, donde las propuestas que haces para modificar algo son escuchadas. Ha sido en los últimos cinco años en Tecpetrol. 

¿Y qué es lo que falta? 

Todavía nos faltan muchas cosas por trabajar, pero cada vez escucho comentarios, frases, incluso en reuniones con direcciones que me da gusto escucharlas, eso no sucedía. 

¿Qué es lo que aprendiste en lo personal de este intercambio de diversidad? 

La verdad es que no por estar en Recursos Humanos sabemos todo y te sorprende que con la diversidad aprendes un montón. Cuando hablo con los más jóvenes aprendo mucho de cómo ahora ellos ven las cosas... y no soy tan grande. Los escucho y entiendo que es otra forma de pensar: quieren las cosas rápido, si les vas a dar un curso que sea mañana. Llegar rápido con las solicitudes y poner atención en cómo nos manejamos. A veces ellos hacen un simple comentario que quizá nuestra generación no lo veía así, pero cada vez somos más sensibles, por ejemplo a las microagresiones, por lo que organizamos un taller enfocado a esto. 

¿Cuál dirías que es tu marca de liderazgo?

Trato de ser una persona cercana al equipo, entender cuál es su contexto personal, porque en función de esa cercanía se da la confianza. Busco que mi equipo confíe en mí para saber la situación por la que están pasando dentro de cada uno de los proyectos. También me gusta ser un buen ejemplo, tener congruencia entre lo que dices y lo que haces. Esa es una marca para mi trabajo y en mi vida personal.